MORDAZA FORZA DOBLE CON BOCA DE 150MM DESCENDENTE

La mordaza doble con boca de 150 mm descendente es una herramienta de alta precisión, diseñada para optimizar los procesos de mecanizado al permitir el trabajo simultáneo de dos piezas.
Esta mordaza, fabricada en acero de cementación F155, ofrece una resistencia y durabilidad excepcionales, asegurando un rendimiento consistente incluso en las aplicaciones más exigentes.
Su diseño compacto y robusto es ideal para talleres que requieren precisión en el posicionamiento de las piezas, así como estabilidad durante el mecanizado.
Los portabocas oscilantes se adaptan automáticamente a la geometría de las piezas, proporcionando un agarre firme y seguro.
Además, esta mordaza es especialmente adecuada para trabajar con cilindros óleoneumáticos, ref. 15080, lo que permite un accionamiento eficiente y sin esfuerzo, reduciendo el tiempo de configuración y aumentando la productividad.

Mordaza doble de alta precisión de boca de anchura 150mm con efecto descendente, pensadas para mecanizar dos piezas a la vez.
Fabricadas en acero de cementación F155.

- Mordaza muy compacta.
- Portabocas oscilantes que se adaptan a la geometría de la pieza.
- Ideal para trabajar con cilindros óleoneumaticos ( referencia 15080).

Recomendaciones de uso:
Seleccione siempre la mordaza adecuada para el tamaño y forma de las piezas a mecanizar, asegurando un agarre firme y estable.
Verifique que los portabocas oscilantes estén en buen estado antes de cada uso para garantizar un ajuste preciso y seguro.
Utilice la mordaza en combinación con cilindros óleoneumáticos para mejorar la eficiencia en el proceso de sujeción.
Asegúrese de que las piezas estén correctamente alineadas en la mordaza antes de iniciar el mecanizado para evitar desplazamientos y errores.
Realice pruebas de sujeción con piezas de ensayo antes de trabajar con piezas definitivas para calibrar correctamente la mordaza.

Recomendaciones de mantenimiento:
Lubrique regularmente los mecanismos de la mordaza para asegurar un funcionamiento suave y evitar el desgaste prematuro.
Inspeccione visualmente la mordaza después de cada uso para detectar posibles desgastes, daños o residuos que puedan afectar su rendimiento.
Almacene la mordaza en un lugar seco y limpio cuando no esté en uso para prevenir la corrosión y prolongar su vida útil.