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La cerrajería es mucho más importante de lo que pensamos en un primer momento. Piensa en como usas “echas la llave” antes de salir de casa, empleas un candado para la taquilla del gimnasio o utilizas la llave a distancia del coche cada vez que quieres abrirlo. Son algunos pequeños gestos que nos hacen entender que la cerrajería está con nosotros a diario.

Pero con ese tipo de usos también llegan los problemas. Son muchos los que se asocian también a la cerrajería, por eso desde el blog de Abaco Suytec hemos recopilado algunos de ellos y las posibles soluciones. Para que no tengas que preocuparte de nada. ¿Comenzamos?

Situaciones habituales relacionadas con la cerrajería

- Perder las llaves: es posible que te haya ocurrido en más de una ocasión. Perder las llaves están a la orden del día y si por mucho que nos volvamos locos buscando, a veces no aparecen. Lo más indicado si no las encuentras es ir a tu cerrajería, ver si se puede reproducir y sino pedir un cilindro nuevo con un juego de llaves y sustituir el que tienes.

- Rotura de llaves: otro de los grandes problemas es cuando una llave de parte o se quiebra. En ese caso, recupera las partes de as llaves y acude al cerrajero. A lo mejor es posible su reproducción, sino te tocará seguir la misma dinámica y cambiar el cilindro y el juego de llaves para asegurar tu seguridad.

- Atasco en la cerradura: una de las situaciones más complicadas es cuando una cerradura comienza a atascarse. Tienes que armarte de paciencia y tranquilidad para intentarlo todas las veces que sea hasta que funcione. Puedes emplear algún aceite para mecanismos obstruidos debido a la falta de lubricación o darle unos golpecitos con un martillo o destornillador.

- Llaves dentro del coche: es muy habitual que te puedas dejar las llaves dentro del coche. Para ello presta mucha atención antes de que se cierren completamente las puertas o si hay alguna ventanilla entreabierta que puedas usar. Llama a tu seguro o una persona de confianza para que te ayude en este proceso.

- El candado no abre: por lo general tan solo falta lubricación ya que son artefactos expuestos a las inclemencias del tiempo (lluvia, humedad, calor, contaminación). Con aceite mineral podría funcionar sin problemas, pero si no es así es posible que se haya desajustado algún mecanismo interno del mismo. En ese caso, lo menos es cortar el candado y comprar otro nuevo.